Aprender a montar en bicicleta es uno de los grandes hitos en la infancia de cualquier niño. Sin embargo, no todos aprenden cómo funciona la bicicleta de verdad; nos referimos a esos principios físicos que hacen que la bicicleta se mueva.
En términos científicos la bicicleta es una máquina: un dispositivo que puede aumentar la fuerza (lo que hace que sea más fácil ir cuesta arriba) o la velocidad. También es una máquina en el sentido de que convierte la energía de una forma en otra. Y todo gracias a la llamada ley de conservación de la energía. Lo que dice esa ley es que no se puede crear energía de la nada ni hacer que desaparezca; todo lo que puedes hacer es convertirla de una a otra.